Hogar de Porsche y Mercedes Benz (y también de millones de personas en su extensa área metropolitana), Stuttgart es la ciudad más grande y capital del estado alemán de Baden-Württemberg. Pero esta ciudad de clase mundial comenzó como el sitio de un modo de transporte totalmente diferente.
Caballos. Y tampoco del tipo agradable. Mirad, el nombre “Stuttgart” significa literalmente “granja cría de caballos” en alemán porque Stuttgart fue fundada originalmente alrededor del año 950 d.C. por el duque Liudolf de Suabia con el propósito de criar caballos de guerra para que sus guerreros los montaran en la batalla y derrotaran a sus enemigos.
Casi mil años después, Stuttgart se convirtió en la cuna de la industria del automóvil en la década de 1880. Pero no se trata sólo de los coches; Stuttgart es conocida por sus capacidades científicas y tecnológicas en numerosos ámbitos y campos del conocimiento. Es una de las ciudades más seguras, ricas y prósperas del mundo.
No es de extrañar entonces que sea el lugar perfecto para una convención anual, como la que celebra cada año la Comunidad Musulmana Ahmadía de Alemania. Ahora, en 2023, la convención (conocida como Yalsa Salana) se celebrará en Stuttgart. Se espera que asistan hasta 60.000 personas no sólo de toda Alemania sino también de todo el mundo. Es un evento de tres días de duración y se llevará a cabo desde el viernes 1 de septiembre hasta el domingo 3 de septiembre.
Lo que hace que el evento sea verdaderamente especial es la presencia de Su Santidad, Mirza Masrur Ahmad (aba), quien es el líder mundial de la Comunidad Musulmana Ahmadía. Su Santidad viajó a Alemania desde el Reino Unido (donde tiene su residencia permanente) y será el orador principal del evento; hablará los tres días.
Su Santidad es un hombre de paz y se ha pronunciado contra la guerra durante años, de hecho, más de una década. Se ha dirigido una y otra vez a los líderes mundiales sobre la necesidad de unidad, hermandad y justicia absoluta en los asuntos geopolíticos. Lamentablemente, su mensaje no ha sido escuchado y la humanidad se encuentra al borde de la aniquilación.
Es en tiempos difíciles como estos los que hacen que el Yalsa Salana sea tan especial; Esta reunión de personas de todo el mundo, de diferentes orígenes y estilos de vida nos muestra lo que sucede cuando los seres humanos de todas partes del planeta reconocen que todos somos creados por un Dios único y estamos unidos en hermandad espiritual. Fundamentalmente, estas convenciones anuales son reuniones de paz.
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